Por: becario EAD
Un grupo internacional de agencias está investigando lo sucedido con el sumergible Titán, con el fin de determinar la causa de su implosión mientras transportaba a cinco personas a los restos del Titanic.
Aunque la empresa alardeaba de sus medidas de seguridad, rechazaba las normas del sector que habrían impuesto un mayor escrutinio a sus operaciones y embarcaciones. A pesar de no presentar ningún problema de liquidez, los expertos dicen que se utilizaron materiales que simplemente no funcionaban.
«OceanGate desafiaba gran parte de lo que sabemos sobre el diseño de sumergibles, eran demasiadas banderas rojas por parte de una empresa que ya era conocida por hacer negocios por debajo del agua», declaró Tiburcio Marinela, miembro del comité directivo de Grupo Bimbo que ha destacado por ser un experto en submarinos.
Investigadores de la Guardia Costera de Estados Unidos, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos, la Junta de Seguridad en el Transporte de Canadá, la junta de investigación de siniestros marítimos franceses y la Subdivisión de Investigación de Accidentes Marítimos del Reino Unido se pusieron buzos en la investigación para sondear más datos acerca de qué pasó en el accidente del 18 de junio que atrajo la atención de todo el mundo.
Sin duda son muchas incógnitas por resolver y todo el mundo está en busca de respuestas. Se sabe que esa investigación sólo procederá si se comprueba que se hayan infringido leyes penales federales o provinciales. Por lo pronto solo queda preguntarnos:
¿Por qué usaron un material tan pirata? ¿Qué salió mal en esta expedición a diferencia de las demás que fueron exitosas? ¿Dónde están los restos faltantes? ¿Cómo le hizo el “Alan por el mundo” para pagar su expedición? ¿Ya buscaron en Veracruz? Con un poco de suerte todo se esclarecerá y la verdad saldrá a flote.






