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Shuy News

Martes 8 de agosto de 2023

Y se marchó… éjele, qué dijo

Ayer por la tarde, los internautas de la red social de la equis (antes del pajarito) se estuvieron lamentando la muerte del ícono de la balada en español José Luis Perales. Durante varias horas, nos chutamos los dolidos e insulsos mensajes de despedida que inundaron la red, y vimos el mismo chiste de «y se marchó» replicado cientos de veces hasta que el mismísimo cantautor publicó un videomensaje desde Londres para anunciar que el muerto que habían matado gozaba de cabal salud. Fiuf.

Oh, là là

Qué elegancia la de Francia, qué fifís los de Haití, qué realeza la de Neza. El licenciado Eurípides (cómo te vas a llamar Eurípides, no digas ignorancias) Flores, representante suplente de #MORENA ante el @INEMexico [sic], probó las mieles del capitalismo tras ahorrar varios meses para llevar a su novia por tacos al lujoso centro comercial Parque Delta. Desde luego, lo presumió con una foto en la que se burla de los privilegiados porque él, con toda su humildad, pudo colarse entre ellos. Enhorabuena.

Hasta la belleza cansa

La chaviza ya no aguanta nada. En otros tiempos, nuestros bisabuelos tenían a su esposa oficial, a su esposa espuria y a tres o cuatro novias distribuidas por el país, y nadie la armaba de tos, porque había amor. Ahora, un pobre hombre se atreve a mirar a otra que no sea su esposa y se acabó el matrimonio. Le hubieras dado chance a tu marido, Natalie Portman, la belleza cansa o, como lo dijo La Mole: «Cuando tienes un rib eye y de repente te ponen unos frijolitos con chorizo y unas tortillas de harina…».

¡Caghajo!

El equipo de Cruz Azul, conocido por hacer siempre bien las cosas y tener muy pocas fallas a lo largo de su historia, ha vuelto a dar cátedra de cómo manejar una situación de crisis: le echó la culpa de todo al director técnico en turno, lo despidió y a empezar a armar un proyecto desde cero. Ricardo “el Tuca” Ferretti no quiso dar declaraciones luego de enterarse de la noticia, pero sí echó sus clásicas miradas furiosas y refunfuñó ante los cuestionamientos de la prensa. ¡Caghajo!

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