Habitantes de San Antonio del Monte, Chiapas, quemaron los nuevos libros de texto de primaria porque consideran que «son del diablo» y «no quieren que se enseñe este tipo de actos, el comunismo, el lesbianismo y el homosexualismo».
Antes de la quema, el comité de padres de familia de una de las pocas escuelas llamadas «Benito Juárez» en el país se reunió para discutir el tema, y llegaron a la conclusión de que los libros contienen ideología como el «comunismo», «tipo zapatismo», al igual que hicieron en Cuba «Fidel Castro y el Che Guevara».
Marx Arriaga, comunista al menos de nombre y responsable de los nuevos libros de texto en la Secretaría de Educación, tuiteó consternado porque no podrá adoctrinar a los niños de esa comunidad.
El tuit de Arriaga concluye: «Muchas felicidades @almaldo2, @XochitlGalvez, @ClaudioXGG, @Mexicanos1o, @RicardoBSalinas, @Javier_Alatorre, PRI, PAN, PRD… ¡Lograron su perversión!».
Con estas palabras, Marx lamentó al mismo tiempo el logro de esa «perversión» y la falla de la propia.
