Lunes 28 de agosto de 2023
La corcholatiza
Cerraron campaña los precandidatos del Morena que quieren sustituir al Licenciado cuando, satisfecho por el deber cumplido, se vaya a descansar a La Chingada. Claudia, Marcelo y Adán acarrearon gente a sus eventos, y Monreal convocó a sus seis seguidores a un Zoom. En el conteo de asistentes, Adán incluyó a todo Tabasco, Claudia a sus subordinados de la CDMX, y Marcelo a sus reproducciones de TikTok. Noroña cerró «campaña» en una cantina de Zacatecas con tres borrachitos locales.
Besito cachichurris
Sigue el drama en la federación española de futbol por el terrible acto de violencia que su presidente Luis Rubiales cometió contra Jenni Hermoso: aprovechándose de que ella respondió «pues vale» cuando él preguntó si podía darle un beso, se lo «propinó». Tres días después, y luego de haber repetido que la gente se escandaliza con cualquier cosa y que el beso fue anecdótico, Hermoso se acordó de que siempre no fue consensuado y sí fue agresión. Todo muy orgánico, no se ven intereses políticos por ningún lado.
Dios los creó hombre y mujer
La raza desquehacerada se puso a funar al cruel septuagenario Carlos Santana por aprovechar uno de sus conciertos para expresar un terrible discurso de odio que le enseñaron en la primaria, allá por 1956: que una mujer es una mujer y un hombre es un hombre. Luego de que el colectivo de los colores, los pronombres y el abecedario hiciera su acostumbrado escándalo, el viejecito salió a pedir disculpas por sus afirmaciones que lastimaron a los que no soportan escuchar una verdad.
Las «swifties» y la Mar
La artista e intelectual Mar de Regil volvió a ser tendencia en Equis (antes tuiter) punto com tras otra lluvia de insultos. Ahora se le fueron encima [#mm, qué antogo] las llamadas «swifties», que generalmente son personas muy razonables y hacen cosas muy normales como juntarse afuera del Foro Sol para ver la pared mientras adentro canta Taylor Swift. El enojo y los insultos llegaron porque Mar se salió a la mitad del concierto, y no aprovechó el boleto que arrebató de las manos muertas de una fan.
