Por: becario EAD
Jaime Maussan, un periodista y ufólogo injustamente demeritado en más de una ocasión, se presentó ante la Cámara de Diputados junto a otros especialistas para plantear el reconocimiento de la vida extraterrestre en la legislación del país.
El Dr. Maussan lleva décadas comprometido con la divulgación acerca del fenómeno ovni y la vida en otros planetas y ha luchado hasta el cansancio para abrirles los ojos y convencer de que no estamos solos a simples profanos que seguramente les creen a sus parejas cuando les dicen que no se mensajean con nadie más.
Este miércoles 12 de septiembre (guarden esta fecha), tras años de mostrar platillos voladores grabados por pacientes de Parkinson con una cámara de baja resolución, por fin sacó el platillo fuerte: ¡cuerpos alienígenas momificados!
«¡Esos salían en el Art Attack», «¡Esto debe ser una broma!», «Yo cuando amanezco bien crudo, ja ja», fueron algunas de las reacciones que les provocó a los presentes al develar la pareja de cuerpos «no humanos» ante el Congreso.
El comunicador mexicano comenta que estos cuerpos fueron hallados en una mina de Perú, entre las ciudades de Palpa y de Nazca, en 2017, aunque dice que venden unos muy parecidos en algunos mercados de artesanías de esa región. «No se vayan a confundir, les juro que no es papel maché», dijo Maussan bajo juramento.
El ufólogo también aseguró que estos dos cuerpos tenían más de mil años, de acuerdo con una investigación realizada por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y dice que su origen extraterrestre es evidenciado por los rasgos que no son típicamente humanos: la cabeza desproporcionada, la estatura exageradamente pequeña y las facciones asimétricas.
«Bien podrían ser restos de un peruano promedio», respondió algún diputado escéptico, que procedió a retomar el coyotito interrumpido.






