Por: Becario EAD.
La Embajada de Israel en este Muro de los Lamentos llamado México, se inconformó por el posicionamiento, todo culei, de nuestro paladín y Nobel de la Paz legítimo, Andrés Manuel López Pacificador, respecto a los recientes ataques del grupo extremista Hamás en la franja de Gaza.
En un comunicado, la embajada expresó que esperaban que México hiciera paro y condenara los actos violentos que han matado a un chingo de judíos y loquitos visitantes que no hallaron mejor lugar para ir a bailar y ponerse pedos por la paz. «¿Para qué tiene patas si va a andar de culo?», finalizó el texto.
Fiel a su costumbre, nuestro Gandhi macuspano siempre en contra de la violencia, llamó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a encontrar una solución pacífica. Hasta el momento, la ONU lo tiene en visto y, en ese periodo, ha publicado dos infografías en celebración de las lesbianas trans o, como nosotros las llamamos: «Viejos lesbianos», pero todavía nada de chambita real de la ONU.
En su morning show, La mañanera, recordó que la Constitución, misma que siempre se pasa por sus huevitos tibios, manda la no intervención, la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de las broncas. A menos que alguno de sus dictadores amiguis se meta en problemas.
El comunicado, con un lenguaje más cuidado y diplomático, concluye que ese tamaño de buevitos solo sirve para respaldar a los malitos y sus fechorías. Así que, por lo pronto, nuestro palomo mayor, de cabecita blanca y piquito de oro, ya se hizo de un nuevo enemigo internacional, por si nos faltaba.
Huevos tibios, la especialidad de la casa.
