Por: becario EAD
«Uh, A-L-E-M-Á-N… ya valió v*rga, Alemán ahí viene», seguramente era lo que pensaba Akasha, novia del «Alemán», al verlo llegar todo mareadote y listo para confundirla con un beat de Bizarrap.
El rapero mexicano «Alemán», que de alemán no tiene ni un pastor, se ha visto envuelto en una polémica luego de que su pareja sentimental exhibiera que no es la persona dulce y tierna que proyecta en todas sus canciones en las que habla de drogas, pandillas y violencia callejera.
La también rapera y acusadora del acusado, Akasha, subió en su cuenta de Instagram evidencia de que había sido violentada por parte del cantante. Además de compartir fuertes imágenes de moretones en diferentes partes de su cuerpo. En la publicación también aparecía un video en el que el cantante se escuchaba fuera de sí.
«¿A quien te vas a c*lear que te va a dar millones, güey?», «Qué v*rga millonaria conoces, güey?», repetía en un tono bastante amenazador.
Si bien, en un principio se pensó que se trataba del coro de una de sus nuevas canciones, conforme avanza el video nos damos cuenta de que era un arranque de celos en el que el rapero comenzó a desvariar y era una manera de decirle a su pareja «¿adónde que más te quieran?», pero como lo haría un neurótico sumamente violento.
Este no es el primer madrazo que pega el «Áleman». Con hits como «Rucón», «Mi tío Snoop» o su última sesión con el icónico Bizarrap, logró colocarse como uno de los más grandes exponentes del rap mexicano, lugar que seguramente se verá comprometido por este escándalo que sin duda será un duro golpe para su carrera, aunque no tan duro como los que él propinó.
Lamentablemente, esta tampoco sería la primera persona de ese género (el hip hop) que resulta tener la mano pesada. Cada vez son más los casos de artistas que «sorprenden» a su audiencia por no dejar la violencia solamente en las letras de sus canciones.
Las publicaciones que lo denunciaban fueron eliminadas y se especula que es porque ya existe un proceso legal en su contra, esperemos que se haga justicia.
Adiós, Alemán, te irá mejor en el bote. El destino del rapero siempre tiene que ver con las barras.