Peso Pluma es declarado enemigo público #1 en Argentina

Por: becario EAD

Tremenda sorpresa se llevó la cantante argentina Nicki Nicole, pues, aunque su ahora exnovio Hassan Kabande, mejor conocido como “Peso Pluma”, hablara mucho de cuernos en sus canciones, nunca pensó que hablaba de los mismos que le iba a terminar poniendo.

Hasta hace algunos meses todos éramos testigos de cómo a pesar de las múltiples humillaciones que sufría por parte de su entonces pareja, el cantante de corridos tumbados parecía estar completamente enamorado de ella, convirtiéndose así, en el amigo que no se daba cuenta.

Miles de fans intentaron intervenir y defender a la “Doble P” del evidente maltrato que estaba sufriendo, invitando a Nicki a que mejor se metiera con alguien de su tamaño, como Hasbulla o el Kemonito, pero ella hacía caso omiso y al pobre Peso Pluma, de tanto desprecio que sufría, ya lo apodaban el “Peso argentino”.

Como todo tiene un límite, hasta las Fantas que uno puede pagar, Hassan se arrastró frente a las cámaras por ultima vez en la ceremonia de los premios Grammy 2024. Después de dedicarle su premio al “Mejor Álbum de Música Mexicana” a la que se refirió como el amor de su vida, el intérprete de “Ella Baila Sola” tuvo una gran revelación. Volteó para abajo, vio a Nicki indiferente, fría y distante, y se dijo a sí mismo:

«NOOO, MI COMPA, usted es el premio, usted es un chingón, ella no lo merece», y con su Grammy en la mano y la frente en alto, procedió a dejarla bailando sola.

Después de algunos días de no saber nada de él, cosa que le importaba muy poco, Nicki Nicole se encontraba tranquila en la casa que compartían juntos, seguramente fodongueando, tomándose un mate y mandándose mensajes coquetos con su exnovio “Trueno” (si a su ex le dicen el “Trueno”, ahí no es), cuando de pronto le llegó la noticia: Peso Pluma fue sorprendido en Las Vegas con una de las nalgonas de Insta que le había obligado a bloquear.

Como a todas las personas de ese tamaño, la furia la invadió de manera desproporcionada y, antes de regresarse derrotada a Rosario, Argentina, no dudó en hacer todo tipo de destrozos en la casa: recortó los cables de algunos de los electrodomésticos, aventó la freidora de aire a la lavadora, le rayó todos sus juegos del Play y le dejó mal cerrado un salero para que se le salga todo cuando lo use.

Peso Pluma se convirtió automáticamente el enemigo público #1 de los argentinos, pues se había metido con la segunda pulga más querida de Argentina solo después de Messi. El cantante ahora está vetado de ese país y ya son muchos los meseros de la Condesa que han prometido escupirle a su comida cuando les toque atenderlo.

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