El pasado domingo se celebró el Día del Padre, y muchas familias festejaron al hombre de la casa poniendo “Hoy tengo que decirte, papá” de Timbiriche una y otra vez, o durmiendo a todos con “Mi Viejo” de Piero, o comprándole un pollito asado y regalos con su propio dinero.
No obstante, muchos hombres se sintieron bastante excluidos porque, si bien, desempeñan el papel de un padre, no cumplen con los requerimientos para ser considerado uno, por ejemplo, haber engendrado una vida.
Esta falta de simpatía hacia los padrastros se debe en gran parte a que padre solo hay uno y, si hablamos de padrastros, puede haber cuantos la madre soltera le quiera ofrecer a sus bendiciones antes de sentar cabeza, además de que existen todo tipo de estigmas alrededor de esta figura, como que acostumbran a dar “cachetadas de padrastro”, o como ellos las llaman, “cachetadas normales”, o que dos de cada tres padrastros son muy mala onda.
Esto ha llevado a cientos de hombres que cumplen la noble labor de criar un hijo ajeno a exigir a las autoridades que se les reconozca con el Día del Padrastro o el Día del “Cuyeyo”, como comúnmente les llaman algunos niños malagradecidos que no reconocen su entrega y les dicen «tú no eres mi papá, cuyeyo».
Ya existe una petición en la plataforma Change.org para que se instaure esta festividad y, de ser posible, para que también tengan su propia canción de Timbiriche. Con 11,422 firmas, la petición ha llegado a la Secretaría General del Consejo Nacional de Población, quienes emitieron un comunicado un tanto confuso para todos los cuyeyos de México:
«Ya leímos atentamente su petición en el ‘shein.org’, esa cosa… No se mamen, nomas falta que quieran hacer el Día del Juanete… Pero ándenle, pues, necios… El Día del Padrastro, o Día del Cuyeyo, se va a conmemorar el 29 de febrero en todo el país…», publicaron por medio de sus cuentas oficiales, dando a entender que no leyeron atentamente la petición.
Esto dejó un tanto desconsolados a todos los padrastros, pues parece ser que los pellejos en los dedos consiguieron su propia festividad antes que ellos. Sin embargo, gracias a la influencia de un podcast muy bueno llamado Los Tres Misisipis, han decidido celebrar su día de manera apócrifa y han establecido que el Día del Cuyeyo se va a conmemorar el domingo posterior al Día del Padre, para que los padres puedan ir a las fiestas de los cuyeyos y viceversa, además de dividirse los gastos de ambos festejos.