Hay mujeres que iluminan tu vida… y hay otras que te la prenden en llamas y luego se hacen las ofendidas cuando las invitas a ver Netflix, o sea, a cochar. Así que antes de que te metas en camisa de once varas, ve a la segura y mejor presta atención a estas 5 joyitas que prepararon nuestros expertos en morritas chisqueadas que aparentan ser el amor de tu vida, pero huelen a toxicidad a cuadras panteoneras.
1. La intensa nivel «¿por qué no me contestas si ya lo leíste?». Esta reina del chantaje emocional sabe exactamente a qué hora entraste a WhatsApp, cuántos minutos viste una historia en Instagram y por qué le diste like a la de RH. Ella no duerme: ella vigila comiéndose un bote de helado. Y si la bloqueas, ya tiene otras dos cuentas listas con fotos de perfil que te harán dudar si es tu tía o una bot rusa. Si no puedes tener paz ni para ir al baño sin que te pregunte «¿con quién estás?», lo que necesitas antes de andar con una morrita… es un amparo.
2. La que tiene «amiguis», pero todos quieren con ella. «Él y yo somos como hermanos», te dice… justo antes de irse de viaje a Valle de Bravo con su «amigui» de toda la vida sin avisarte. Y tú ahí, con cara de payaso de rodeo, viendo sus historias donde él le agarra la cintura, la pica las costillas y la hace reír «de compas». Espóiler: no es su amigo. Es el que está esperando que tú la riegues para sembrar su semilla. Si tienes que competir con media liga de fútbol 7 por su atención… mejor juega solo, mi rey.
3. La que aún «no supera a su ex». Dicen que todos tenemos historia, pero esta tiene saga completa, spin-off y capítulo especial en Navidad. Llora cada que escucha a Camila, guarda las cartas de su ex y todavía lo llama «mi error favorito». Tú solo estás ahí de trampolín emocional. Si en pleno cuchiplancheo te dice «ay, con él también hacíamos esto», mejor sal corriendo o mínimo pídele el Uber.
4. La «espiritual» que te lee el tarot y el celular. Ella dice que cree en las energías, los chakras y la alineación astral, pero también te hace lectura de mensajes, llamadas perdidas y signos del zodiaco para justificar sus arranques de celos. Mercurio retrógrado no es excusa para revisarte la galería mientras te bañas. Si tu relación empieza a parecer ritual de sacrificio azteca, hazte el muerto y huye.
5. La que todo lo sube a TikTok. Te graba dormido, te graba cocinando, te graba llorando porque ya no tienes saldo para el Uber. Ella no vive el amor, lo documenta. Y no lo hace por romanticismo, sino por vistas, y hará lo mismo cuando truenen. Por eso, la ventilada de tu relación con ella siempre terminará con un fondo de Karol G, y tus reconciliaciones en reels donde pareces más actor de fondo que pareja. Así que ya lo sabes: si te dice «te amo», ten por seguro que lo grabará para usarlo como audio en un trend. No es amor, es puro marketing y tú no monetizas nada.
Hay morritas que te suben el autoestima y otras que te suben la presión, el colesterol y el nivel de ansiedad. Así que si algo no huele bien desde el inicio, no es tu desodorante. Es tu intuición de vato gritándote que corras. Y recuerda: más vale solito que pagar cenas, Uber, atención y dignidad por una morrita que no te aprecia como el premio que eres, mi compa.
