Una mujer del tipo «kon unoz pantallazos le arruino el San Balentin a barios…» festejaba su cumpleaños con su novio, un hombre felizmente casado, cuando la invadieron unas ganas irresistibles de gritarle al mundo que su esposa le plancha las camisas, pero ella se las quita: comenzó a transmitir en vivo y exhibir a este Don Juan que, sin éxito, intentaba esconder su identidad.
En una clara provocación hacia su socia, la Cazzu de su Nodal, la mujer comenzó a presumir que el sujeto al que llamó «mi vida» está «casadito, casadito», pero está con ella… seguido de jaloneos y manoteos mientras le pedía que no se escondiera. Otro caso más de hombre acorralado por sus propias decisiones. Mucho se habla de elegir muy bien a tu esposa, pero poco del casi extinto arte de elegir bien a tu amante.
Video: https://twitter.com/EsdeProfugos/status/1961163090852216951
