La influencer que se había casado consigo misma anunció su divorcio.
Después de casi dos años de haberse casado consigo misma en una ceremonia de “sologamia”, la infuencer brasileña Suellen Carey por fin aceptó que su relación no estaba funcionando y se divorció.
Todo comenzó cuando, unas semanas después de casada, descubrió que ya no sentía lo mismo al hacerse el amor a ella misma, práctica también conocida como “el requinteo de tololoche”. Tras varias sesiones de terapia de pareja a las que iba acompañada de un espejo de cuerpo entero, admitió que el amor había terminado.
Aún no se sabe quién se quedará con la casa, ni quién le pagará pensión a quién, pero una cosa queda clara: las mujeres no se aguantan ni ellas mismas.






