En un hallazgo que promete revolucionar el árbol genealógico de la humanidad, un grupo de científicos identificó una nueva especie humana bautizada como Homo Noroñus, en honor al senador mexicano Gerardo Fernández Noroña. Según los investigadores, esta especie vivió hace 200 mil años y exhibía características únicas: un cráneo inmenso, dientes que podrían abrir cocos sin esfuerzo, y una inexplicable habilidad para monopolizar reuniones grupales con sonidos guturales.
El estudio, publicado en la revista Nature, detalla que los Homo Noroñus poseían cráneos más grandes que los neandertales, lo que los hacía ideales para almacenar argumentos innecesarios en debates inexistentes, justo como le pasa al flamante senador morenista. Los fósiles, encontrados en Asia Oriental, muestran que esta especie tenía mandíbulas particularmente robustas, diseñadas no solo para masticar carne cruda, sino también para resistir largas diatribas sin perder el aliento.
«Eran criaturas sociales, aunque altamente ruidosas. Sus gritos probablemente servían para ahuyentar depredadores y compañeros de cueva por igual, además de uno que otro oponente del sexo opuesto», explicó el paleontólogo chino Dr. Wu Tang, mientras examinaba un cráneo de la nueva especie, que todavía mantenía un tufo asqueroso.
Junto a los restos, los científicos encontraron herramientas primitivas de piedra, que parecen haber sido utilizadas para fabricar pieles y argumentos inquebrantables. «Es fascinante cómo esta especie podía usar el mismo palo afilado tanto para cazar como para señalar culpables imaginarios en la tribu», añadió el Dr. Tang. También hallaron dibujos rupestres que, según los expertos, representan reuniones donde los Homo Noroñus se situaban en el centro, gesticulando mientras el resto del grupo fingía interés.
La comunidad científica está desconcertada por el paralelismo entre esta especie y ciertos líderes actuales, sobre todo mexicanos. «La similitud entre el Homo Noroñus y algunos políticos contemporáneos es asombrosa. Parece que ciertas características evolucionaron para quedarse, como el tono elevado para defenderse de los demás. En resumen, el Homo Noroñus claramente sobrevivió al período glacial, evolucionó camuflándose con el Homo sapiens y llegó al Senado», comentó la antropóloga canadiense Margaret Whispers, quien es parte del equipo.
Por su parte, el propio senador Gerardo Fernández Noroña reaccionó al descubrimiento con un video desde su oficina, declarando: «Es evidente que estoy haciendo historia desde hace 200 mil años, aunque no se note mucho». Mientras tanto, el fósil será exhibido en el Museo Nacional de Historia de China, junto a una grabación simulada de cómo podrían haber sonado los debates entre los Homo Noroñus: un coro interminable de gruñidos que solo se interrumpía para respirar.