De manera inesperada, aunque entendible, un grupo de astronautas que se encuentran varados en la Estación Espacial Internacional (EEI) han enviado un mensaje a la NASA: «Ya mejor déjennos aquí». Al parecer, tras poco más de un mes orbitando la Tierra, los valientes exploradores del espacio han decidido que la vida allá arriba es preferible al mugrero en el que se ha convertido el planeta.
La nave espacial Starliner, que despegó el 5 de junio, transportó a los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams, rumbo a la Estación Espacial Internacional (EEI), quienes solo estarían allá por una semana. Lamentable o afortunadamente, siguen varados en el complejo espacial multinacional debido a fallas constantes de la nave de la empresa Boeing, la Starliner, principalmente en sus propulsores y en las fugas de hielo, mismas que retrasarían su regreso hasta febrero de 2025, si bien les va.
Ante este inconveniente y viendo que la vida en la Tierra va de mal en peor, los astronautas han solicitado que mejor los dejen allá. «Estábamos emocionados por regresar, pero luego recordamos todas las cosas horrendas que pasan en nuestro planeta, como el tráfico, las reuniones inútiles que podrían haber sido un correo, las filas interminables en el supermercado, la Leagues Cup y las olimpiadas. Aquí, al menos, podemos disfrutar del silencio absoluto, la falta de comerciales en la televisión y que no hay tanto pendejo», admitió el comandante de la misión, mientras, simulaba la escena de Homero en el espacio comiendo papas flotantes.
La NASA, por su parte, ha mostrado preocupación por esta inusual solicitud. «Estamos trabajando para resolver la situación lo más pronto posible», declaró un portavoz. «Sin embargo, estamos considerando sus deseos y evaluando si prolongar la misión sería lo mejor para la salud mental de la tripulación, además, es posible que nunca sepamos cómo chingados podríamos traerlos de vuelta, sale muy caro y la neta ni nos caían tan bien».
Por otro lado, de acuerdo con la declaración de las esposas de los astronautas, estos les habrían dicho que solo iban por una semana, pero ahora parece que tendrán que acostumbrarse a tener una relación a larga distancia. Y parece que lo mismo tendrán que hacer sus seis y siete novias, respectivamente.
