Andrés Manuel López Obrador, el influencer más presidente de la historia, presumió el día de hoy, 21 de septiembre de 2023, ser el streamer más visto de América Latina; por encima de la Rivers, Ibai y otros adolescentes que importan poco o nada.
Con esto, el presidente de México ya no tiene que trabajar, ya que ingresa a sus arcas cerca de 800 mil pesos mensuales, desde las cuentas oficiales de México, nomás por levantarse tempranito a decir mentiras en sus horas laborales.
La estrategia que ha seguido el titular del ejecutivo mexicano, a diferencia de otros creadores de contenido, es poner la alarma a las cinco de la mañana para levantarse a decir números al azar, inventar estadísticas en un Palacio proveído por el Estado y hablar como si tuviera problemas neurológicos irreparables.
El fraude del presidente mexicano ha pasado desapercibido por todos, ya que usa todos los recursos del Estado en la producción de sus videos y se estima que al final del sexenio haya logrado juntar el dinero suficiente para irse a la Chingada, su rancho.
Expertos proyectan que Andrés Manuel perderá influencia una vez que se convierta en ex presidente y quede a su suerte cuando su partido sea tomado por la fauna de orangutanes que lo integran.
