Seguramente alguna vez has estado rascando la pantalla de inicio de TikTok con una mano y rascando tu entrepierna con la otra, cuando de pronto te aparece un video de un tal Alexis Omman sorprendiendo a un vendedor de esquites con un «¿QUIERES IR A DISNEY?», que termina cambiándole la vida para siempre, o al menos durante los 4 días que duró el viaje, antes de volver a la pesada rutina del vendedor ambulante pero con nuevos sueños de una vida que nunca podrá tener.
Estos actos de altruismo logran conmovernos de tal forma que hasta nos hacen considerar empezar a donarles a los niños de Un Kilo de Ayuda cuando vamos al cajero, aunque en las fotos siempre salgan todos felices y plenos. Uno pensaría que estas acciones solo se ganarían comentarios positivos de la audiencia, pero algunas personas consideran que los regalos que hace el TikToker muchas veces no son los más adecuados para quien los recibe.
Digamos que, como tú tío que le regala el nuevo FIFA a tu primo que tiene sus pronombres en sus redes sociales, o ese padrino de bautizo que ves una vez al año, que te sigue regalando camisas talla M sin saber que ya te hacen ver como tamal mal amarrado, se dice que Alexis ignora por completo las necesidades de las personas a las que supuestamente quiere ayudar.
Dentro de sus casos más polémicos está cuando le regaló una PC gamer a un niño que acababa de perder a sus padres después del huracán Otis, cuando le regaló boletos VIP para ver a System of a Down a una niña que padecía síndrome de ídem, y encima el concierto era en Boston, o cuando le pareció buena idea reglarle un Husky siberiano a un franelero que ya tenía 5 perros en el tejaban donde vivía. Esto ha despertado sospechas sobre si en verdad se trata de alguien con un corazón noble que quiere ayudar a los demás, o si simplemente tiene un humor bastante torcido y aprovecha su popularidad para hacer bromas perversas que solo él entiende.
Como era de esperarse, Alexis volvió a hacer de las suyas. Después de que una señora dudara de la veracidad de sus videos en los comentarios, el tiktoker quiso darle una gran lección, no sin antes investigarla y percatarse de que lleva 4 años en silla de ruedas. Para esto, manejó un Toyota Yaris del año desde la Ciudad de México hasta Pachuca, decidido a regalarle el automóvil a la que él llamó su “hater favorita”.
Con una sonrisa que muchos consideraron maquiavélica, Mauricio se plantó afuera de la casa de “Doña Carmina, la que no camina”, como la llaman sus vecinos, y empezó a tocar la puerta de su casa bruscamente hasta que salió siendo empujada por uno de sus hijos.
Con musiquita emotiva, el tiktoker hizo entrega del auto y, si bien, es un gran regalo, la señora se mostraba un tanto extrañada. El video acaba con Mauricio reflexionando sobre «hacer el bien sin mirar a quién», y asegura que la señora quedó muy satisfecha con su regalo: «Ella estaba muy nerviosa… la agarré mal parada, pobrecita… pero le encantó», dijo mientras su sonrisa se convertía poco a poco en una carcajada. No se sabe nada de la señora.