Por: becario EAD
Hace unos ayeres, un pequeño de 9 años proveniente de la sierra de Jalisco sacudió la industria musical como pocas veces lo hemos visto. Hablamos de Yuawi (no encontramos registro de que tenga apellidos, es como Prince), quien saltó a la fama por interpretar e incluso participar en la composición de la pegajosa canción «Movimiento Naranja», la cual formó parte de un spot electoral del Movimiento Ciudadano y rápidamente se convirtió en un himno para muchos mexicanos.
Desde entonces, Yuawi ha sido una inspiración para miles de personas, quienes lo admiran a pesar de, seamos sinceros, solo ser un «one hit wonder». Sus orígenes humildes y esa alegría contagiosa bastaron para que se ganara el corazón de todo un país, pero son pocos los que conocen su verdadera historia.
A muy temprana edad, este mítico personaje fue visoreado por un grupo de asesores políticos en su comunidad huachicol, en Jalisco. En él notaron lo que los franceses llaman un «je ne sais quoi» que lo convertía en el candidato ideal para un ambicioso proyecto que apenas se estaba cocinando. El pequeño fue separado de sus padres y puesto en cautiverio para adiestrarlo y prepararlo para lo que se avecinaba.
Después de muchas horas de entrenamiento, ensayos exhaustivos y una dieta rigurosa, Yuawi estaba listo para hacer historia e interpretar el mejor jingle que un partido político había tenido jamás… el resultado ya lo conoces.
¿Pero qué pasó con Yuawi? ¿Se ganó su libertad?
El pequeño ha tenido pocas apariciones desde el cierre de las campañas presidenciales del 2018. Si bien, estas han sido muy breves, seguramente te has percatado de algo peculiar en ellas: Yuawi no está envejeciendo.
Conforme crecía, miembros del partido Movimiento Ciudadano notaron que el niño huachicol se volvía más difícil de manejar, era contestón, comenzó a fumar, procreó tres hijos y tenía una actitud desafiante. Es por eso por lo que, para no verse en la penosa situación de sacrificarlo, decidieron congelarlo.
«Aparte, si nos sigue creciendo, va a parecer reguetonero», dijo uno de los altos directivos del partido político.
No la pensaron dos veces y sometieron a Yuawi a un proceso de congelamiento con carbonita para después resguardarlo en una bóveda secreta. Ha sido descongelado en un par de ocasiones para algunos eventos y spots, pero la gente llevaba años sin saber nada de él, hasta el día de hoy…
—Háganlo, ya es momento—, se escuchó decir a Samuel García en sus oficinas de campaña en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
—¿Está seguro, patrón?—, le contestó uno de sus achichincles.
—Sí, lo de Mariel no está jalando como yo pensaba…—, respondió Samuel pensativo.
Rápidamente se tomaron cartas en el asunto y se envió la orden de meter a Yuawi en un baño maría para descongelarlo cuanto antes. A las pocas horas se informó que ya había recuperado casi por completo la consciencia y, aunque estaba un poco oxidado, ya lo habían puesto a ensayar de nuevo.
Se cree que van a hacer un remix de «Movimiento Naranja» con algunas colaboraciones de talla mundial y parece que estará acompañando a Samuel durante todo su recorrido por la república, subiéndose a sus hombros, corriendo alrededor de él y trepándosele, como un alebrije. Esto sin duda va a agarrar desprevenidas a sus dos contrincantes en busca de la silla grande y esta contienda parece ponerse más interesante.
Habemus Yuawi.
