Un egresado de la prestigiosa Universidad Iberoamericana, más conocida como «La Ibero», ha encontrado su vocación inesperada como vendedor en un tianguis local. Santiago Levi o, como sus amigos lo conocen, Santi, a secas, de 25 años y con un título en Negocios, ahora se dedica a vender calcetas y accesorios de moda en el famoso tianguis de Tepito, donde asegura que su educación finalmente está rindiendo frutos y que la mejor escuela es la vida misma.
Santi, que ahora ya domina la lengua autóctona de sus colegas vendedores y ha dejado atrás su acento fresón, se graduó con honores y elogios académicos, pero descubrió rápidamente que el mercado laboral no le implicaba un reto como el que buscaba para saciar su hambre de triunfo, por lo que decidió incursionar en el mundo de la venta al menudeo de los tianguis.
«Aunque mandé mi currículum a todas partes, parece que las empresas no valoraron mi capacidad para andar de merolico diciéndole a la gente “pásele, damita; pruébese lo que guste, estamos al 2 x 1”, por lo que decidí poner en práctica todo lo que había aprendido en la carrera para emprender mi propio negocio», explica Santi, mientras organiza las calcetas de colores y acomoda las prendas de moda que al rato le caen a comprar los Brayans y las Britanys.
Obviamente, la decisión de convertirse en vendedor ambulante no fue fácil, pues, al principio, pensó en seguir con un posgrado, pero, según comenta, luego se dio cuenta de que sus habilidades eran más apreciadas en el mundo real de la racita de Tepito, donde ya se puede camuflajear con el resto de la fauna y ha hecho buenos amigos y algunos amores.
La Universidad Iberoamericana, conocida por su enfoque en la formación integral y el desarrollo humano, no tardó en reaccionar con un comunicado oficial: «Estamos orgullosos de nuestros egresados, quienes llevan el conocimiento a todas las esferas de la sociedad, pero, de preferencia, si trabajan en un tianguis, no mencionen que estudiaron en La Ibero, porfis».
Por su parte, Santi tiene grandes planes para el futuro, pues está planeando expandir su negocio a dos locales, pues la variedad de modelos ya no le cabe. Además, está pensando en iniciar con exportaciones a grandes potencias económicas, como China, a pesar de que es de ahí de donde viene el 99% de su mercancía. Mientras tanto, en el tianguis de Tepito, los compradores pueden disfrutar de una experiencia de compra como en cualquier otro tianguis, pero atendidos por alguien que despilfarró los ahorros de su familia en estudiar en «La Ibero».
