«Han sido las peores dos horas de mi vida»: Adrián Marcelo deja los vicios antes de entrar a La Casa de Los Famosos

Como lo leyeron en este medio semanas antes de que otros noticieros lo anunciaran, después de una agresiva negociación, Televisa le llegó al precio al influencer Adrián Marcelo y lograron firmarlo para la segunda temporada de La Casa de Los Famosos México.

Además de una cantidad absurda de dinero, el cual seguramente se le irá en su ludopatía o lo va a repartir una milanesa a la vez entre los crikosos que se encuentra en la calle grabando Radar, el mismo Emilio Azcárraga convenció al regiomontano de participar en el reality al prometerle también un micrófono nuevo para su programa de YouTube, no como el que tiene todo mordisqueado y reteniendo olores, además de acceso VIP a un catálogo del que no tenemos permitido dar muchos detalles.

Dicho contrato contiene cláusulas que sin duda le serán un tanto difícil de cumplir, como no hacer bromas sobre lo poco famosos que son la mitad de los integrantes, no hacer comentarios “tan” gordofóbicos, no preguntarle a Mayito por qué se fue tanto tiempo a cagar aquella fatídica tarde, pero sin duda, la que más le costará trabajo cumplir es la de no consumir ninguna sustancia ilegal durante sus dos meses de encierro.

El youtuber comenta que en un principio pensó que era un simple truco de sus seres cercanos para anexarlo disimuladamente, pero rápidamente entendió que las mencionadas limitaciones son comprensibles dada la cantidad de señoras que lo verán y se podrían escandalizar por su drogadicción y su humor ácido.

Adrián ya se encuentra entrenando para esta gran competencia y tiene ensayados algunos bits cómicos para ganarse el corazón del público, como enseñar las nalgas a la menor provocación, bailar el gallinazo para sacar de sus casillas a Mario Bezares, y hacer uno que otro comentario incendiario para descolocar a sus competidores.

En cuanto a su consumo excesivo de marihuana, el conductor dice que para cuando inicie la competencia ya no tendrá dependencia a ninguna sustancia, agregando que, aunque ha sido un largo y difícil proceso, ya ha comenzado a limpiarse:

«Han sido las peores dos horas de mi vida», agregó para los micrófonos de EAD, a quienes puede o no que les haya soltado unas milanesas para hablar mal de sus contrincantes y hacerlo triunfar.

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