El youtuber de youtubers y presidente más animalista del mundo, Andrés Manuel López Comunicador, se quiso convertir en la «Karen» de todos los gatos hambrientos del continente, también conocidos como «chayoteros», al inaugurar el primer Encuentro Continental de Periodistas Independientes. El Salón Tesorería del otrora honorable Palacio Nacional se convirtió, por un día, en el arenero más apestoso de todo México, pues en el lugar se dieron cita una amplia cantidad de alcahuetes que no desaprovecharon la oportunidad para demostrar que el «chayote» no siempre deja para comer decentemente.
En un morning show inusual, pero igual de repleto de seudoperiodistas a modo, el Licenciado inauguró el encuentro de estos comunicadores aliados del poder, quienes juntos no tienen más vistas que un perro atropellado. Bajo el lema «Informar es liberar», el encuentro también contó con la participación del bañagatos y vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, quien pronunció un discurso sobre los medios de comunicación, junto con otros oradores de medios que, al igual que los ninis, reciben su precaria beca mensual del Bienestar.
El evento inició como se esperaba de esta calaña de «periodistas independientes», aplaudiéndole al líder del Ejecutivo como si no hubiera mañana y de eso dependiera su próxima quincena. Y, de hecho, así es. Entre gritos, porras y aplausos, los comunicadores no desaprovecharon la oportunidad para corear a los cuatro vientos a quién le deben su subsistencia y los tres pares de sacos de Milano que compraron.
«¿Verdad que es un honor estar conmigo, pinches hambreados? Nada más les voy a encargar que no se suban a los muebles, no me toquen nada y nada más comen y se van. Les mandamos preparar un platillo tradicional de mi pueblo, de cuando yo era joven y me la pasaba arreando mulas en lugar de ir a la escuela. ¡Cómo extraño a mis mulitas! Bueno, pero ahora tengo a mis gatos, digo, mis comunicadores dependientes, ja, ja, ja, ja», se filtró que habría dicho el Licenciado fuera de micrófono, mientras era aplaudido efusivamente por los «periodistas».
A pesar de todo, el punto positivo del encuentro fue que los asistentes pudieron comer todo lo que quisieron de un amplio menú que incluyó huevo revuelto a la mexicana con un pan frío o un pan frío con huevo en pico de gallo. Algunos consideraron que este evento podría ser histórico, pues nunca se había alimentado a tanto hambreado en un mismo lugar, y todo gracias al Licenciado. Con razón lo quieren tanto.