Mexicana de Aviación, la aerolínea operada por la Sedena y diseñada para servir al pueblo, traicionó sus principios al desbordar sus ambiciones para ofrecer un servicio 100% fifí: los vuelos privados.
Luego de que se filtrara información sobre las operaciones de la aerolínea recientemente rescatada por el presidente de la república por la módica cantidad de 815 millones de pesos para la compra del logotipo, el nombre comercial y un yonke lleno de fierro viejo, quedó en evidencia que una de las rutas que ofrecen entre las ciudades de Acapulco (ACA) y Pachuca (AIFA) fue convertida en un servicio privado, pues llevó solamente a un pasajero.
Hasta el momento se desconocen la identidad del magnate que contrató el servicio y el monto que pagó para reservar el vuelo para él solo, pero se rumora que el costo mínimo de operación de un vuelo comercial ronda el millón de pesos.
Se espera que el gerente general de esta gran nación que es Méjico, Andrés Manuel López Obrador, aborde el tema en su morning show La mañanera para que explique la razón por la que la aerolínea de todos los mexicanos ahora vende vuelos privados.