Este viernes se reportó pánico masivo en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, debido a la escasez generalizada de carbón y carne para asar, luego de que las carnicerías y supermercados no se dieran abasto para la demanda provocada por las celebraciones del 4 de julio, Día de la Independencia de los Estados Unidos de América, país al que los regios creen pertenecer.
La zona metropolitana de Monterrey, Texas, tiene la densidad de carnitas asadas por kilómetro cuadrado más alta del país, por lo que las tiendas están acostumbradas a la alta demanda de productos cárnicos, principalmente flecha y costilla cargada (porque «es más rica la carnita pegada al hueso», no por baratos), pero este fin de semana fue atípico, pues empezó un día después de la celebración de la independencia.
«Ya estamos trabajando en el problema», comentó el gobernador Samuel García en su canal oficial, la cuenta de IG de su esposa, «tenemos planeado ir por las vacas que quepan en mi Cybertruck al rancho de mi compadre Elon, quien ofreció ayudarnos durante esta crisis».
Hasta el momento ha habido varios incidentes de histeria en Carnes San Juan, la Carnicería Ramos y en tres H-E-B de la localidad, aunque aún no se reportan heridos.
