Lo que comenzó como una romántica tarde de pareja terminó en un auténtico drama doméstico cuando Vanessa Torres, de 27 años, puso a prueba el compromiso de su novio, Carlos «El Charly» Jiménez, al invitarlo a que limpiara el baño luego de haberlo usado. Según Vanessa, esta tarea cotidiana era la verdadera prueba de amor y una forma que le recomendó su mejor amiga para crear vínculos duraderos. «Si de verdad te quiere y cree que eres el amor de su vida, esta es la prueba de fuego, amiga», le habría dicho su mejor amiga antes de esa fatídica cita.
«Es que si no puedes con un escusado, ¿cómo vas a manejar el caos de una hipoteca o de mi familia en Navidad?», argumentó Vanessa, mientras le extendía a Carlos una botella de ácido muriático y un cepillo. Para ella, el ejercicio representaba más que una simple limpieza; era una metáfora del trabajo en equipo en tiempos difíciles. Carlos, con cara de quien enfrenta su propio juicio final, aceptó el reto, no sin antes plantearlo con su mejor amigo, quien le dijo que no era tan mala idea ir conociendo los «humores» de la novia, con quien ha mantenido una relación de tres años. Sin embargo, al salir del baño comentó: «No mames, esto no es amor, esto es un programa de supervivencia extrema. Hasta pensé en llamar a un exorcista para que me ayudara».
Vanessa defendió su postura, afirmando que el verdadero amor no esconde nada: «Quiero un hombre que no solo me diga cosas bonitas, sino que sepa enfrentar el sarro, las manchas difíciles y hasta mis olores con la misma pasión». Carlos, por su parte, tenía una visión menos poética: «Yo venía con planes de ver Netflix y resultó que mi morra me vio cara de intendente. Me siento drenado y no de la forma que esperaba terminar la noche».
Luego de horas de reflexión, y tras un profundo encuentro con su propia paciencia, Carlos decidió terminar la titánica tarea, porque es un hombre entero, hecho y derecho. Por su parte, Vanessa, sin mostrar remordimientos, comentó: «Bueno, ahora estoy segura de que Carlos sí es el hombre con quien quiero pasar toda mi vida».
Carlos, por otra parte, ya planea aplicarle la misma a su aún novia. Por lo que pronto se comprobará si Vanessa está dispuesta a crear vínculos duraderos, luego de que él se aviente unos buenos tacos de barbacoa y tenga que usar su baño.
