Por: becario EAD
Taylor Swift, o Taylor «Sniff» como la han apodado algunos internautas, fue señalada en los últimos días debido a que en algunas fotos y videos ha dado la impresión de estar como computadora envirulada: bien trabadota.
No es la primera vez que se insinúa que a Taylor le gusta el olor de la cocaína, pues para aquellos que saben leer entre líneas, es evidente que sus gestos en eventos como los VMAs, donde se le vio bailando al ritmo belicón de Peso Pluma, son característicos de alguien que le dio un jalón a la caspa del diablo.
Otra de las supuestas pruebas de que la cantante gusta de oler mesas es una foto que ha estado circulando, donde nos dejó ver sus fosas nasales y se lograba apreciar cómo traía «empanizado el moco» (Taylor´s Version).
Son muchas las personas que están convencidas de que efectivamente Taylor tenía «harina en la narina» o «gis en la nariz», al grado de insinuarse que probablemente estaba homenajeando al recién difunto Benito Castro, pero sus fieles seguidoras, las swifties, no tardaron en desmentir dichas teorías, aclarando que solo se trataba de moco normal por un fuerte cuadro de gripe colombiana del que se contagió su ídola.
