Por: becario EAD
Cuando podrían estar innovando de distintas maneras, por ejemplo, creando la primera pastilla del día siguiente para hombre o generando una vacuna contra la ̶h̶o̶m̶o̶s̶e̶x̶u̶a̶l̶i̶d̶a̶d intolerancia, los científicos chinos han decidido experimentar con una cepa mutante del covid-19 que mata al 100% de los ratones «humanizados» (no en el sentido del perro chihuahua de tu prima Carlota que le pone vestiditos y lo lleva en carriola al súper).
A diferencia de la versión mas austera del covid, que era una simple gripa que de manera aleatoria mataba a 2 de cada 100 personas que la contraían, esta nueva versión más equipada atacó el cerebro de los roedores genéticamente modificados para «humanizarlos», los cuales murieron 8 días después de haber sido infectados.
Los ratones, antes de ser fritos y servidos en brocheta acompañados con mucho arroz, fueron estudiados por los investigadores, quienes notaron que el virus también dañó sus pulmones, huesos, ojos, tráqueas y autoestima.
«Ya mamalon», exclamó el líder del proyecto, esbozando una sonrisa porque todo había salido como lo planeado.
Aún no se entiende qué es lo que motiva a los comeperros para querer exterminar al resto de la raza humana, pero se cree que las constantes burlas, estereotipos infundados y el despectivo término “chino cochino”, podrían haber influido en que se alojara en su corazón un profundo resentimiento que se manifiesta en esos ojos entrecerrados, como de furia contenida.
Primero nos dieron una calentadita con la versión beta de su virus mortal, luego procedieron a freírnos el cerebro con Tiktok, controlando así nuestros pensamientos y hasta nuestras erecciones, y ahora hemos llegado al momento en el que se consuma su plan macabro para exterminar al mundo.
Así como los chinos, aún hay personas que no abren los ojos y niegan lo que es evidente. Dos palabras: compren yuanes.
